Una novia que corra para tomar el colectivo,
mantener mi acento,
un padre optimista, muy seguro de su inseguridad.
Leche caliente que no queme,
un submarino de verdad,
y que se pinten la cara antes de llorar.
Que la mesa camine.
Que alguien me ayude a escribir esta poesía,
que me saquen a bailar.
Y que, Jimi, de una vez por todas,
Jimi deje de pedir perdón.
1 comentario:
Publicar un comentario